Puntos clave:
- Un conocimiento profundo del contexto y de las necesidades locales permite a los profesionales desarrollar intervenciones adecuadas según el contexto.
- Las niñas y los niños pueden participar en la investigación.
- Las investigaciones, las prácticas y las intervenciones existentes, llevadas a cabo por las partes interesadas a nivel local ofrecen valiosos aprendizajes.
La investigación exhaustiva del contexto y las necesidades locales debe involucrar a los niños, los habitantes, los socios y otras partes interesadas a nivel local. La investigación tiene como objetivo profundizar en la comprensión, en lo local, de las partes interesadas, las poblaciones, la diversidad, las redes sociales, las prácticas socioculturales, los medios de subsistencia de los y las habitantes, la infraestructura y los servicios, al igual que las estructuras de gobernanza, las relaciones de poder y los usos del espacio a nivel local. El alcance de esta investigación dependerá de la cantidad de información que ya se haya recopilado durante la fase de inicio, y de la cantidad que ya esté a disposición de los socios.
El análisis del contexto debe centrarse en comprender la vida cotidiana de los niños y niñas en el contexto urbano local y las dimensiones que afectan su bienestar. Para poder comprender plenamente el bienestar de las y los menores, también deben incluirse en la investigación a los cuidadores/as, hermanos/as y docentes. Lo anterior puede resaltar los desafíos y oportunidades de los niños y niñas en el contexto urbano y proporcionar la base para planificar las actividades de diseño de la intervención. Esta investigación puede ser facilitada por los y las integrantes del equipo con conocimiento previo del contexto, en especial si ya conocen a los habitantes y hablan el(los) idioma(s) de los y las participantes.
Para los fines de las intervenciones de construcción, el análisis del contexto debe tomar en cuenta diferentes escalas de espacio, p. ej. el barrio, la ciudad y el país. Los problemas, necesidades y dinámicas a nivel local, y el impacto potencial de una intervención, han de entenderse en relación con dichas escalas.
El análisis del contexto debe centrarse en la ubicación y el objetivo del proyecto. Por ejemplo, si el proyecto tiene como objetivo construir una guardería para comunidades urbanas desplazadas, el análisis del contexto se centrará en los niños y niñas de tres meses a cuatro años de edad, sus cuidadores/as, los espacios que habitan y cómo funcionan otras guarderías en la localidad.
Puede que sea útil consultar la literatura y los documentos de otros contextos para obtener más claridad sobre lo que se debe investigar y entender, y cómo funcionan los procesos en otros lugares. Por ejemplo, puede que no haya suficiente información sobre la situación de los derechos de las personas menores de edad en el país donde se tiene prevista la intervención. El análisis del contexto también puede ayudar a delimitar y definir mejor el lugar de intervención, los objetivos y los usuarios/as.